Poblado celtíbero-romano.
Al Sur de la ciudad se encuentra un asentamiento de origen ibero conocido
con el nombre de Tolmo de Minateda. El emplazamiento es impresionante en la cima de una colina que domina
los alrededores.
La situación estratégica del lugar hizo que los iberos se asentaran en el
siglo V a. de C., prolongándose la ocupación del asentamiento hasta el siglo XI en plena dominación árabe
de la península.
A pesar de la riqueza y del interés del yacimiento, éste se encuentra en
un lamentable estado de abandono. Debió haber un momento puntual de interés que propició la creación de
un sendero con paneles explicativos que, en el momento de la visita estaban destrozados. La mayor parte
de los restos se encuentran cubiertos de vegetación aunque se pueden apreciar restos de viviendas, de una
prensa de aceite y otras estructuras. Es impresionante la entrada a la ciudad en la que se conservan,
impresas en la roca, las huellas de los carros que por allí transitaban.
Tengo noticia de que cerca de la ciudad hay una necrópolis ibera, una villa
romana y un abrigo con pinturas rupestres que aún no hemos visitado.